El Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) entregó trampas y atrayentes que permiten mitigar los efectos de la Mosca de alas manchadas a productores y productoras de berries de la comuna de Coihueco, uno de los sectores más afectados en Ñuble por esta dañina plaga.
Este aporte es parte de las actividades que está desarrollando el SAG en el contexto Programa FNDR financiado con fondos del Gobierno Regional para reforzar los manejos y mitigar los efectos de la Drosophila suzukii en la región.
El Alcalde de Coihueco, Carlos Chandía, valoró el aporte del Gobierno Regional al financiar este programa en beneficio de los productores y productoras de la comuna. También destacó el trabajo que está realizando Prodesal, que congregó a alrededor de 40 beneficiarios en el sector del camino a Miraflores, en el predio del productor Rolando Medina.
Por su parte, el Director Regional subrogante del SAG, Roberto Ferrada, destacó que este proyecto es resultado de un trabajo colaborativo y financiado por el Gobierno regional a través de un Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR). Asimismo, resaltó la importancia de que la mayoría de las personas beneficiadas fueron mujeres de la agricultura familiar campesina de la comuna.
“Ellas tienen el doble rol de ser madres pero también de hacer producir esta tierra tan fértil con sus frambuesas y frutillas. Queremos ayudarlas con estas trampas para que ustedes las operen y puedan mitigar a la Mosca de alas manchadas. Tenemos que ir generando conciencia fitosanitaria. La mejor estrategia para evitar el ataque de plagas es tener plantas sanas, bien nutridas, cuidadas y regadas”, sostuvo.
La plaga
La Mosca de las alas manchadas (Drosophila suzukii) afecta principalmente especies frutales berries tales como mora, frutilla, frambuesa y arándanos, así como a cerezas. También se puede encontrar en especies no cultivadas, silvestres u ornamentales, como es el caso de la zarzamora que se utiliza ampliamente como cerco vivo en las zonas rurales.
El programa que está ejecutando el SAG recibió un financiamiento de $ 360 millones del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR) para gestionar acciones a fin de los pequeños agricultores puedan convivir con esta plaga, paliar los daños y obtener la mayor producción de sus respectivos cultivos.
El equipo de profesionales y técnicos desarrollan un programa de visitas a huertos para entregar trampas y atrayentes para capturar el insecto, y desarrollan charlas de capacitación en que enseñan cómo elaborar trampas caseras y los manejos culturales adecuados para prevenir la presencia de la plaga.