Con la finalidad de evitar la introducción de plagas cuarentenarias o no presentes en nuestro país, funcionarios del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) de la región del Bio Bio realizan una exhaustiva inspección a los embalajes de madera que ingresan a Chile, principalmente, a través de los puertos y, en menor medida, por el Aeropuerto Carriel Sur, acción que ha permitido este año interceptar cuatro plagas de interés forestal, destacando la plaga cuarentenaria ausente Sinoxylon conigerum.
En este sentido, el Director Regional del SAG, Iván Ramírez, destacó que “casi el 100% de los productos que ingresan al país se encuentran asociados a embalajes de madera, ya que la mayoría de ellos son usados para sujetar, proteger o transportar algún producto, y si no son sometidos a un tratamiento fitosanitario podrían trasladar plagas y enfermedades importantes, lo que sin duda constituye un riesgo fitosanitario para cualquier país. Por ello, el SAG los inspecciona en los puntos de ingreso o en destino, y en caso de intercepciones se aplican los protocolos definidos para estos casos”.
Durante el año 2021, se inspeccionaron 5.867 lotes de embalajes de madera – 2.661 en los puertos de la región y 3.206 en destino- lo que corresponde al 13% del total nacional, siendo la tercera región con más inspecciones de estos productos.
Al respecto, el encargado regional de Protección Agrícola- Forestal y Semillas del SAG de Bio Bio, Rodrigo Ther, indicó que la NIMF N°15 (Norma Internacional para Medidas Fitosanitarias) regula el embalaje de madera utilizado en el comercio internacional y describe las medidas fitosanitarias que se deben aplicar para reducir el riesgo de introducción y/o dispersión de plagas en los embalajes de madera, incluida la madera de estiba.
“En Chile, la Resolución del SAG N°133 del 2005 y sus modificaciones (Resol. 7008 del 2013) regula los embalajes de madera de internación, estableciendo que éstos deben contar con un tratamiento fitosanitario (NIMF N°15) y su respectiva marca, además de estar libres de insectos. En caso de detectar insectos vivos (huevos, larvas, pupas o insectos adultos) o signos de insectos vivos, como viruta o aserrín proveniente de los embalajes de madera importados, se debe comunicar a la Oficina SAG más cercana”, dijo el profesional.
Dentro de las medidas que deben cumplir los embalajes se contempla el uso de madera descortezada para la confección de éstos y la aplicación de algún tratamiento fitosanitario para impedir el alojamiento de plagas como tratamiento térmico o fumigación con bromuro de metilo. Además, se establece que los embalajes de madera deben ingresar al país con una marca reconocida internacionalmente para certificar el tratamiento realizado. Entre los embalajes de madera regulados se encuentran los pallets, bins, parrillas, marcos, jaulas, tarimas, cajas, cajones, tie bins, carretes, entre otros.