La Capitanía de Puerto de San Vicente organizó la realización de un simulacro de emergencia en la Bahía de San Vicente. En la actividad participaron algunas de las empresas que cuentan con instalaciones en dicha zona, entre ellas ENAP y SVTI.
Este ejercicio de carácter anual se realizó con el fin de poner a prueba y evaluar los Planes de Contingencia para el control de derrames de hidrocarburos y el sistema de control de incendios, en el Terminal Marítimo San Vicente de ENAP.
En la actividad se simuló la presencia de aproximadamente 3 metros cúbicos de crudo oriente en el mar, producto de la detonación de un artefacto explosivo de procedencia desconocida, que rompió una línea en el muelle pasarela del Terminal.
Debido a lo anterior y tal como se establece en los planes de contingencia, se detuvieron de inmediato las operaciones del muelle y embarcaciones, desplegándose las barreras de contención alrededor de la zona del “derrame” para evitar la dispersión del supuesto producto.
En el operativo participó personal del terminal marítimo, bajo la supervisión de personal de la Autoridad Marítima. Las operaciones de control de la contingencia simulada fueron supervisadas desde la Sala de Control, que se ubica en tierra a poco más de un kilómetro de distancia del lugar del simulacro.
Evaluación
La evaluación del ejercicio fue positiva según señaló Catherine Calvo, directora del Terminal Marítimo San Vicente, quien explicó que “este tipo de simulacros anuales, son parte de nuestro sistema de gestión de riesgos y cumplen el objetivo de constatar cómo estamos preparados y medir la respuesta ante cualquier eventualidad que pueda ocurrir. Así estar alerta y tener todos los recursos disponibles para controlar cualquier tipo de emergencia”, indicó la responsable.
Previo al ejercicio, y para dar tranquilidad a la población, se informó a la comunidad aledaña al puerto pesquero de San Vicente sobre este operativo.
El Terminal Petrolero de ENAP en San Vicente fue inaugurado en junio de 2013. Con una inversión cercana a los US$ 140 millones, es uno de los más modernos de Latinoamérica. Su implementación significó un salto tecnológico tanto en materia de seguridad como para las operaciones de carga y descarga de combustibles de ENAP en la mencionada bahía.