De cara a una nueva temporada de pesca de sardinas, durante noviembre, la Municipalidad de Talcahuano formó una mesa de trabajo para evitar episodios de malos olores como los ocurridos durante el primer semestre del presente año.

La instancia, está integrada además por pescadores artesanales e industriales, el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca), la Armada, entre otras instituciones y busca implementar acciones y coordinar esfuerzos para que la actividad no produzca hechos negativos para la comunidad y medio ambiente.

“Nos sentamos en esta mesa y hemos avanzado en un protocolo que permita generar garantías de que no tendremos episodios de malos olores”, explicó el alcalde Henry Campos.

Así mismo, Macarena Cepeda, presidenta de la Asociación de Pescadores Industriales del Biobío (Asipes), afirmó que “es una instancia muy positiva, porque nos permite dar cuenta de los protocolos que hemos implementado que tienen relación con transporte seguro de pesca a granel y, además, con la gestión de olores”.

En la misma línea, Iván Oyarzún, director (s) Sernapesca Biobío, sostuvo que “es una muy buena oportunidad de poder aportar a la articulación intersectorial y minimizar los efectos que puede tener esta actividad”

En tanto, César Jorquera, vicepresidente de Conapesca, advirtió que hay que “evitar las externalidades de todos los procesos. Nadie se merece los malos olores, así que todas las acciones que podamos hacer van hacia el bienestar de Talcahuano”.

El jefe comunal añadió que la pesca es una actividad importante para el desarrollo económico, pero se debe “generar de la manera correcta”.

En este sentido, se acordó programar los zarpes, para evitar conflictos en el puerto, y las recaladas, buscando que el recurso no llegue en estado de descomposición a la industria, entre otros.

• Fuente Municpialidad de Talcahuano