Las discrepancias en los pesos de los contenedores y la experiencia de los funcionarios en el análisis de riesgo, llevaron al Servicio Nacional de Aduanas a realizar dos efectivos procedimientos de fiscalización en el Puerto de Coronel, en la región del Bio Bio.

Una vez seleccionados ambos depósitos de mercancías, un equipo de funcionarios de la Aduana Regional de Talcahuano los sometió a una primera revisión con el camión escáner, para poder ver qué contenían estos contenedores que de acuerdo a la documentación estaban vacíos.

En efecto, las imágenes de rayos x inmediatamente arrojaron reveladores resultados. En el primero de los contenedores se visualizó una gran cantidad de carga a granel distribuida en casi toda la estructura metálica.

Al realizar el aforo físico, es decir, abrir el contenedor, los fiscalizadores aduaneros descubrieron un contrabando con 23.100 kilos de chatarra de aluminio, producto que fue enviado desde Estados Unidos.

En tanto, en el segundo contenedor seleccionado para la fiscalización, los equipos de la Aduana de Talcahuano también se valieron de la tecnología del camión escáner y las imágenes de rayos x para descubrir que dentro de él había oculta una gran estructura, pese a haber sido declarado como vacío. En este caso, al abrir el contenedor que provenía desde Perú se encontró un repuesto industrial, una camisa de cilindro de motor diésel, con un peso de 5.400 kilos.

Avalúo

El aluminio fue valorizado en US$ 9.240, con un cálculo de evasión fiscal de US$ 2.415, mientras que el valor del repuesto se estimó en US$ 12.540 con una evasión de impuestos de US$ 3.277.

El Director de la Aduana Regional de Talcahuano, Claudio Cid, explicó que “dentro de los perfiles de riesgo y los análisis que realiza Aduanas constantemente, están este tipo de situaciones que buscan básicamente defraudar al fisco al tratar de eludir el pago de impuestos”.

Agregó que “por eso es muy importante la experiencia de nuestros funcionarios para poder detectar estos ilícitos, además del uso de todas las herramientas que tenemos disponibles para realizar de la manera más eficiente posible nuestro trabajo, para resguardar los intereses del Estado”.

Como en ambos casos las mercancías halladas no habían sido declaradas por el importador en los documentos correspondientes, éstas fueron incautadas y los consignatarios serán denunciados por el presunto delito de contrabando tipificado en el Artículo 168 Inciso III de la Ordenanza de Aduanas.