La Armada de Chile a través de su rol de  Autoridad Marítima, informó que el buque de carga general, Manantial, de  bandera ecuatoriana, mantiene vigente sólo una de las tres ordenes de arraigo emitidas por tribunales del país, lo que acerca la posibilidad de un retorno a su puerto de origen tras haber cumplido un año en aguas nacionales.

Así lo informó el Contraalmirante Carlos Huber, Comandante en Jefe de la II Zona Naval, jurisdicción en la que se encuentra la motonave y que actualizó la situación del buque y su tripulación, señalando que la situación en general ha mejorado.

“En este momento el buque mantiene una de las tres ordenes de arraigo todavía de los tribunales de Valdivia, se encuentra con dotación de 17 personas, 2 de las cuales son  chilenas: el capitán  y el primer piloto, que están a la espera de que se levante la orden de arraigo para poder zarpar y volver a Ecuador”, indicó el oficial naval.

Huber además agregó que “ la Dotación se encuentra sin novedad, el buque está agenciado, por lo tanto, todo el tema de combustible, agua y víveres  están previstos permanentemente por esta agencia naviera que esta a cargo del buque, el que se mantiene por ahora en la bahía de Concepción hasta que se levante la orden de arraigo”, cerró Contraalmirante.

 Fiscalización DT

Mientras, la Dirección del Trabajo (DT) realizó este lunes nuevamente una fiscalización en la motonave constatando a que pese al compromiso del armador por cancelar las remuneraciones de la tripulación expresado a través de un documento notarial, estas permanecían aún impagas según señaló el Director Regional del Trabajo, Rodrigo Reyes.

“Después de la fiscalización realizada el antes de ayer, se pudo constatar que el empleador, el armador, realizó un documento notarial en Ecuador, en el cual se comprometía  a pagar las remuneraciones y las prestaciones adeudadas a los trabajadores. Sin embargo, hasta el día de dicha fiscalización no se había pagado, por tanto seguía el incumplimiento en esta motonave”, señaló la autoridad.

De todos modos, aunque exista incumplimiento en la normativa laboral, sólo se necesitaría levantar la última orden de arraigo emitida por tribunales nacionales, para que la Autoridad Marítima autorice el zarpe de la embarcación, ya que las infracciones constatadas por la DT  no impiden que el nave, por fin pueda volver a su puerto de origen, en Ecuador.