Con el objetivo de potenciar el consumo de productos del mar, como una alternativa económica y de alto valor nutricional, Camanchaca instaló una máquina expendedora de jurel en la estación intermodal de Coronel, tras el exitoso piloto que se realizó en la Estación Central, Región Metropolitana, durante junio.

Alejandro Florás, gerente regional Camanchaca Pesca Sur, explicó que, “la recuperación de la biomasa del jurel y su escenario favorable permite trazar nuevos proyectos en beneficio de las personas, en Camanchaca hace varios años venimos trabajando e ideando nuevas formas para ir acercando cada vez más los productos del mar a las mesas de los chilenos y chilenas, convencidos de que elaboramos productos de gran calidad y que son un aporte nutricional para todas y todos”. indicó.

La elección de la comuna pionera en recibir la primera jurelmática en regiones no es casual. Coronel es una zona pesquera por excelencia y donde se produce el 90% de las conservas de jurel para comercialización nacional e internacional.

Jorge Bernales, gerente comercial de Camanchaca, comentó que “esperamos poder expandir la presencia de estas máquinas expendedoras a otras comunas del Bio Bio y a otras regiones, para luego ir ampliando la oferta de la marca, sumando otros alimentos como los choritos, langostinos, salmón, entre otros”, sostuvo.

La nueva máquina expendedora es parte de los proyectos realizados por Camanchaca durante este año en Coronel, comuna donde en mayo se inauguró la nueva planta de Congelados de jurel, la cual significó una inversión de US$30 millones para la optimización de procesos productivos, lo que se traduce en una producción de 650 toneladas diarias de producto terminado.

Mercado del jurel 

Actualmente en Chile más del 80% de las capturas pesqueras industriales se destinan a consumo humano directo. Dentro de ellas, el jurel tiene una participación mayoritaria gracias a su recuperación y proyección, que le permitió obtener en 2018 la certificación internacional Marine Stewardship Council (MSC) que garantiza la sostenibilidad del recurso.

Según datos de Asociación de Industriales Pesqueros (Asipes) en 2021, los pescadores industriales del Biobío capturaron más de 430 mil toneladas de jurel, de las cuales el 85% fue destinado al consumo humano directo, lo que se tradujo en la elaboración de 94 millones de conservas y más de 230 mil toneladas de congelados de este recurso. En el caso de las conservas de jurel el 60% de la producción se destina a mercado nacional.

El escenario favorable de recursos disponibles para la industria pesquera chilena, ha derivado en el aumento del consumo de estos productos a nivel nacional y además ha resultado en un panorama próspero para trazar nuevos proyectos, se indicó.